Algunas mejoras de rendimiento no suponen mejoras perceptibles para los usuarios. Es importante concentrar las optimizaciones de rendimiento en las áreas que supongan problemas para la aplicación específica. Algunas optimizaciones del rendimiento constituyen buenas prácticas generales y siempre se puede realizar un seguimiento de las mismas. Para otras optimizaciones, el que sean útiles o no depende de las necesidades de la aplicación de su base de usuarios anticipada. Por ejemplo, las aplicaciones siempre funcionan mejor si no se utiliza ninguna animación, vídeo o efectos y filtros gráficos. No obstante, uno de los motivos para el uso de la plataforma Flash para crear aplicaciones se debe a sus capacidades gráficas y de medios que permiten aplicaciones de gran expresividad. Considere si el nivel deseado de complejidad se corresponde bien con las características de rendimiento de los equipos y dispositivos en los que se ejecuta la aplicación.
Una advertencia común es “evitar la optimización demasiado pronto”. Algunas optimizaciones de rendimiento requieren la escritura de código de un modo que resulta más difícil de leer o menos flexible. Una vez optimizado, el mantenimiento de este código es más complejo. Para esos tipos de optimizaciones de rendimiento, en ocasiones es mejor esperar y determinar si una sección concreta de código funciona incorrectamente antes de optar por optimizarlo.
En ocasiones, la mejora del rendimiento implica algunas desventajas menores. Idealmente, al reducir la cantidad de memoria consumida por una aplicación también aumenta la velocidad con la que la aplicación realiza una tarea. Sin embargo, el tipo idóneo de mejora no siempre es posible. Por ejemplo, si una aplicación se bloquea durante una operación, la solución implica a veces la división del trabajo para que se ejecute en varios fotogramas. Debido a la división del trabajo, es probable que se tarde más en general en llevar a cabo el proceso. Sin embargo, es posible que el usuario no note el tiempo adicional, si la aplicación continúa respondiendo y no se bloquea.
Un aspecto fundamental para saber qué optimizar y si las optimizaciones resultan útiles es la realización de pruebas de rendimiento. En
Prueba comparativa e implementación
se describen varias técnicas y sugerencias para probar el rendimiento.
Para obtener más información sobre la determinación de partes de una aplicación que son buenas candidatas para la optimización, consulte los siguientes recursos: